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Charlas hispanas, episodio mil ciento cincuenta y tres, Crecer bilingüe, con Susan. Bienvenidos a Charlas Hispanas, el podcast diario de español latinoamericano. Puedes ver la transcripción completa de este audio y acceder a ejercicios y explicaciones para aprender el vocabulario y expresiones que utilizamos Hola, en Charlas Hispanas punto com. Hola hola, queridísimos oyentes, ¿cómo va todo? Los saluda su profesor, locutor y amigo colombiano, Alejandro, y me complace el día de hoy presentarles una invitada muy, muy especial, y estoy muy emocionado porque es su primera aparición en nuestro podcast, y, aunque es su primera aparición, ustedes ya han oído sobre ella, ya conocen algunas cosas saben que es muy importante para mí, porque se trata de mi querida esposa.

Hola, Susen, ¿cómo estás?

Hola a todos, estoy muy bien, muy feliz de estar aquí.

¿Estás nerviosa o cómo te sientes? O no creo que debe haber nada de nervios, ¿verdad?

Solo un poquito.

¿Te consideras una persona tímida o normal, Susy?

Depende. me conoces que, sí, soy tímida al principio, pero después de sentir más cómoda, Suby, el opuesto.

Sí, más tranquila. Bueno, como pueden notar, queridos oyentes, el español de Susy es espectacular. No es su lengua nativa, pero lo hace muy bien, así que te felicito de antemano.

Muchas gracias.

Bueno, Susy, cuéntanos un poco de ti, ¿quién eres? ¿Qué haces? ¿A qué te dedicas? Dale una pequeña introducción a nuestros queridos oyentes sobre tu vida y, si te parece, empezamos a hablar después de nuestro tema de hoy, que es el bilingüismo.

Claro que sí. Bueno, como ya saben, mi nombre es Susan Riaño, y soy la esposa de su locutor colombiano favorito. Yo estudié arquitectura, pero mi pasión es el arte y actualmente soy artista, pinto murales, retratos y también soy fotógrafa. Hoy vamos a hablar de crecer bilingüe, entonces nací en Estados Unidos, crecí aquí, pero mi familia es de Ucrania.

Wow, muy interesante, porque es una mezcla de idiomas que no se suele ver muy comúnmente el español y el ucraniano. Además, hay que decir que no solamente que existe bilingüe, yo diría que políglota desde pequeña porque tengo entendido que desde pequeña también aprendiste ruso en la iglesia en la que a la que pertenecías, pues también se hablaba ruso a la par del ucraniano, ¿no es así?

Bueno, sí, tienes razón. Desde pequeña yo escuché ucraniano y también ruso, aunque el ucraniano es mi lengua materna.

Muy bien, qué interesante y es fascinante. Bueno, pues tengo muchas preguntas. Entonces, dices que el ucraniano es tu lengua materna, eso significa que en casa, Susy, mientras crecías con tus padres, con tus primos, tus hermanos y hermanas, ¿hablaste ucraniano o fue literalmente solamente con tu madre y con tu padre? ¿Cómo fue esa experiencia para ti? ¿Qué pensamientos iniciales podrías compartir de de crecer bilingüe?

Bueno, yo tengo seis hermanos mayores y cuando yo empecé a hablar, no sé, por ahí dos años, mis hermanos ya estaban en la escuela, ya empezaron a aprender el inglés, y entonces desde pequeña yo estaba escuchando ucraniano e inglés, y yo diría que siempre hablaba con mis papás en ucraniano, pero con mis hermanos, una mezcla, y más recientemente hablamos prácticamente cien por ciento en inglés.

Me imagino, y bueno, es algo que he escuchado en algunos padres ucranianos y rusos que viven aquí en los Estados Unidos, que ellos intentan, pues obviamente que sus hijos mantengan la lengua, bien sea el ucraniano o el ruso o incluso hasta el rumano, y en los primeros años es así. Los primeros hijos, de hecho, los que todavía no tienen contacto con el sistema de educación público aquí en los Estados Unidos, hablan ucraniano en su casa, pero a medida que van creciendo y tienen la influencia de sus compañeritos en la escuela, pues van usando más palabras en inglés hasta que después completamente usan el inglés y eso lo transmiten a sus hermanitos más pequeños, a tal punto que, en muchos casos, los hermanos menores, pues no tienen el nivel, el mismo nivel de ucraniano o ruso de sus hermanos mayores. ¿Crees, Susy, que ha sido el caso particular para ti y qué crees que piensan tus padres o si has escuchado que han dicho algo al respecto?

Creo que en general eso es cierto, pero en mi caso yo diría que mi nivel de ucraniano es un poquito más fuerte que algunos de mis hermanos mayores, y puede ser porque entre nueve y catorce años yo tomaba clases de ucraniano en la iglesia leer más fuerte y todas estas cosas, y eso me ayudó fortalecer mi nivel de ucraniano.

Wow, esto me parece fascinante porque podríamos decir, Susy, que, bueno, tu primera infancia, tus primeros años, pues sabías el ucraniano, lo hablabas muy bien, pero tu competencia escrita o de lectura quizás no era la mejor, por eso fueron necesarias estas clases voluntarias de ucraniano, de gramática, de lectura, de escritura y, por lo que veo, te ayudaron muchísimo. Tus hermanos mayores no tuvieron esta oportunidad.

No todos, y algunos no tenían tanto éxito o tanto tiempo practicando en esas clases, y yo que para cada persona es diferente, para unos es más fácil y para otros más difícil aprender o escribir y leer.

Claro, me puedo imaginar. Bueno, ahora nuestros oyentes estarán preguntando, bueno, pero ¿esta mujer creció hablando ucraniano, ruso, inglés y está hablando español muy bien, ¿Qué otras lenguas te llaman la atención? ¿Qué otras experiencias has tenido con el aprendizaje de lenguas, Sudy?

En Estados Unidos es común tomar otra lengua extranjera en la escuela. En mi caso, yo empecé con el español en el séptimo grado y a me encantó desde el principio. Yo creo que mi experiencia con el ucraniano me ayudó a aprender el español y con mi pronunciación también, y yo tomé unos años de español, unos dos años, y lo dejé porque en mi colegio no ofrecían clases de español, y después en la universidad yo tomé otro año más de español. Entonces fue un poquito inconsistente, pero cuando y yo nos conocimos, yo decidí practicar mi español de una manera muy seria y desde aquel momento estoy cada vez mejor.

Hubo una motivación emocional bastante fuerte allí entonces, ¿no?

Sí, puede ser.

Bueno, además que, claro, nosotros, algunos de ustedes ya saben nuestra historia, pero antes de de ir allí, quiero preguntarte, entonces, bueno, tu interés por el español, creciste hablando inglés ucraniano y ruso, pero, obviamente, el inglés lo empezaste a aprender con tus hermanos en casa y se potenció y se mejoró muchísimo más en la escuela, a tal punto, pues, que eres hablante nativa de inglés también, nunca tuviste ningún problema con tu inglés en la escuela, ¿verdad?

Sí, yo diría que sí. que para algunas personas, al entrar la escuela en el kinder, por ejemplo, no conocen nada de inglés y es muy difícil comunicar, pero para fue un poquito más fácil porque ya ya conocía algunas palabras en inglés.

Ok, perfecto, muy bien, Susy. Esos son tus primeros idiomas, pero ¿cuál fue el idioma por el cual nos conocimos y cuál fue tu experiencia con este idioma?

Bueno, el idioma, que fue la razón por la cual nos conocimos, es el turco y, wow, Yo empecé con turco porque conocí a algunas personas turcas y solo quería al principio aprender unas palabras como hola y buenas noches, lo más básico, pero me gustó mucho. Me gustó mucho cómo suena y me pareció una lengua bonita.

Apoyo la idea, es una lengua espectacular, es hermosa, suena muy muy bien al oído y, Susy, creo que debemos practicar un poco más, porque estamos un poquito oxidados en nuestro turco, ¿no?

Un poquito, mucho.

Creo que desde que nos conocimos y hablamos por un tiempo dejamos de practicarlo y eso no está bien, ¿no?

Es un poquito triste porque es la razón por la cual nos conocimos.

Exacto. Bueno, volviendo al bilingüismo y, en este caso, al multilingüismo, porque obviamente eres políglota, quisiera preguntarte, ¿qué beneficios ves tú? ¿Qué ventajas crees que tuviste al crecer en un hogar bilingüe y ser una persona multilingüe? ¿Cómo cómo lo ves ahora? ¿Ves en retrospectiva esos años en los que creciste con estas ventajas y ahora, pues tienes muchos idiomas más en tu repertorio.

¿Cómo te ha servido esto en tu vida?

Un beneficio muy grande que yo veo es poder conocer varias culturas y en mi caso una cultura ucraniana y otra americana. Esto me ayudó a ser amigos de diferentes contextos, de leer literatura de diferentes países, por ejemplo, y me ayuda a ser una persona más internacional con entendimiento de diferentes culturas. Además, creo que, como ya mencioné, aprender un idioma ayuda a alguien a aprender otro idioma.

Estoy de acuerdo con eso, ¿por qué lo piensas así? ¿Fue tu

caso? Sí, con el español.

Claro, porque digamos que las estrategias que empleas para aprender una segunda lengua, puedes emplearlas para una tercera lengua, las técnicas de estudio, incluso, muchas veces el vocabulario es muy similar, ¿no es así?

Exacto, y creo que hay más beneficios en cuanto al cerebro y la cognición, ¿tú sabes algún beneficio?

Sí, qué buena pregunta, qué buena pregunta porque, de hecho, estaba pensando justamente en eso, y sin duda el bilingüismo y el multilingüismo afecta positivamente a la cognición y el desarrollo del cerebro en el niño, en la persona bilingüe, desde muy temprana edad. Las investigaciones en este campo nos sugieren que el aprendizaje de dos o más idiomas desde la infancia puede tener beneficios cognitivos bastante significativos, como, por ejemplo, una mayor flexibilidad mental, capacidad para resolver problemas y habilidades de atención. También incrementa la capacidad de retención, la memoria y la creatividad, y otros estudios han demostrado, incluso, que los cerebros de los niños bilingües pueden desarrollar estructuras cerebrales diferentes en comparación a los monolingües, o sea, los que hablan solamente un idioma, lo que, pues, obviamente, proporciona ventajas en el procesamiento del lenguaje y, pues, otras funciones cognitivas naturales del cerebro humano que hemos explorado anteriormente, como la categorización, la imaginación, las metáforas, la ejemplificación, pero bueno, ese es otro campo, entonces, hay muchos beneficios.

Sí, es fascinante y creo que eres el experto.

No, no un súper experto, pero me encanta este tema, este campo y me recuerda mucho mi tema de maestría, de mi tesis. Muy bien, Susy, bueno, acabamos de hablar de las ventajas, ¿no? De los aspectos positivos, pero sin duda yo creo que también puede haber desafíos, especialmente para un niño. No si viviste esto, si quieres contarnos algo al respecto de algún reto o desafío que tuviste creciendo bilingüe o multilingüe, o si todo fue color de rosas para ti.

Yo creo que un reto puede ser, a veces para un niño, puede ser la confusión entre idiomas o palabras, especialmente en el principio principio, y a veces uno no puede recordar la palabra en inglés y solo solo lo recuerda en ucraniano. Otro reto puede ser con los papás, por ejemplo, quienes no pueden entender todo lo que hablan sus hijos, porque los papás ya no tienen un nivel tan fuerte de inglés y los hijos pueden hablar en inglés. Eso fue el caso de mi familia. Sabemos que no es imposible aprender un idioma en tu mayor edad, pero es mucho más fácil como niño. Entonces, para mis papás su

nivel de inglés no es tan fuerte como el nivel de nosotros. Claro, me imagino, especialmente para tu papá, porque yo diría que tu mamá tiene un nivel de inglés bastante decente. Para tu papá es un poco más difícil, es un reto, y esa es la razón por la cual yo estoy estudiando ucraniano, para comunicarme con él, ¿no?

Claro, muy bien.

Muy bien, eso sí.

Y bueno, Alejo, creciste en una familia monolingüe, pero aprendiste el inglés en una edad más temprana, ¿no? ¿Cómo fue tu experiencia en comparación a la mía?

Sí, esa es una muy buena pregunta porque, como lo mencionaste, yo crecí en una familia monolingüe. Definitivamente mis padres no hablan otra lengua, quizás mi mamá tiene conocimientos de inglés, pero ellos básicamente hablan han hablado toda su vida en español. Yo empecé a hablar, o no diría que hablar, empecé a estudiar inglés desde muy temprana edad, pero no de forma muy seria ni constante desde, pues el jardín de niños, lo típico, ¿no? Que nos enseñan los colores, los números, los pronombres personales y canciones en inglés, pero, pues nada muy significativo. Ya cuando empecé a estudiar inglés de manera más fuerte fue en la primaria, después en la secundaria, digamos que ya tuve un nivel decente, diría yo, en décimo grado y en once.

Es interesante porque no decimos un décimo grado, sino once en Colombia, por lo menos. Bueno, no importa. El grado once es el último del sistema educativo colombiano para la secundaria, y yo diría que en ese en ese grado logré un nivel B uno, por lo menos, Bastante aceptable, digamos que no es muy básico, pero tampoco es experto, es el nivel medio, intermedio, y de allí pasé a la universidad donde, pues estudié lenguas y mejoré muchísimo mi inglés y aprendí también francés. Entonces, los retos fueron más fuertes cuando empecé a tomar clases en inglés, incluso clases de inglés y clases completamente en inglés, porque, claro, no tenía todo el bagaje cultural y literario que una persona bilingüe tiene, entonces mi aprendizaje fue más consciente. Digamos que lo que, como lo entendemos en la lingüística y en la enseñanza de lenguas, es que existe aprendizaje de lenguas y adquisición de lenguas.

Lo que sucede con un niño que crece bilingüe es que este niño no aprende la lengua, este niño la adquiere, básicamente, como de forma automática sin mucho esfuerzo. Entonces, yo diría, adquiriste la lengua inglesa y la lengua ucraniana. Ya después, digamos que puliste algunas cosas gramaticales y de lectura y esto, pero la adquiriste ya. En mi caso, yo solo adquirí la lengua española y el inglés, el francés, el ucraniano, el turco, no ha sido adquirido si no ha aprendido, entonces, digamos que es un esfuerzo más grande, cuesta un poco más, pero no es imposible, y con esto quiero animar a a nuestros oyentes que, aunque no adquiramos una lengua tan fácil como lo hacen los niños, podemos y mucha motivación.

Sí, es muy posible y nosotros somos testigos y también somos testigos de que puedes perder un poquito sin practicar y es muy importante mantener la lengua.

Estoy de acuerdo, como nos ha pasado con el tour con que amamos esta lengua, pues no nos hemos dedicado mucho a mantenerla, a practicarla, y creo que que es un proyecto en el que podemos trabajar. Pronto, ¿qué te parece?

Sí, lo vamos a hacer.

Muy bien. Gracias, Susy, por acompañarnos el día de hoy. ¿Dolió?

No dolió tanto.

Muy bien. Yo creo que estoy seguro que nuestros oyentes van a apreciar muchísimo tu participación el día de hoy, y será un placer, un honor tenerte de manera más frecuente como invitada en nuestro podcast, porque tienes mucho que aportar desde tu experiencia como aprendiente de lenguas y, wow, con la diversidad cultural con la que cuentas, ¿no?

Con mucho gusto, gracias por invitarme.

No, el placer es mío y, bueno, aunque tenemos un gran paso pronto, los oyentes no pueden ver, pero en este momento estamos grabando en el estudio, en la oficina que tenemos en casa y estamos rodeados de cajas.

Torres de cajas.

¿Hay mucho desorden?

No demasiado.

Bueno, pues, como muchos de ustedes ya saben, estamos próximos a mudarnos, de hecho, solo nos quedan unos cuantos días para partir, saldremos a otro estado de de los Estados Unidos y bueno, en una próxima oportunidad les contaremos cómo nos fue en la mudanza y Y además va a ser la primera vez donde Alejo maneja un camión y en un viaje de más de doce horas. Sí, así que agradezco sus oraciones y sus pensamientos, queridos oyentes, porque va a ser un reto interesante. La primera vez que manejé un camión es de dieciséis pies y, guau, es un viaje de más de doce horas, así que les contaré cómo nos va en unas cuantas semanas y estamos en contacto.

Gracias nuestros oyentes por acompañarnos. Esperamos verlos pronto.

Muy bien, Susy, muchas gracias. Y queridos oyentes, recuerden que pueden ver la transcripción completa de este audio y pueden acceder a una hoja con ejercicios y explicaciones para aprender el vocabulario y las expresiones que utilizamos en este episodio. Ese contenido solo está disponible para suscriptores premium. Formen parte de esta comunidad en Charlas Hispanas punto com.

Podcast: Charlas Hispanas
Episode: 1153. Crecer bilingüe, con Susan