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Charlas hispanas, episodio mil ciento setenta y cuatro, Mujeres de la Música Argentina. Bienvenidos a Charlas Hispanas, el podcast diario de español para aprender vocabulario, expresiones, gramática, cultura, noticias e historia de Latinoamérica. Puedes ver la transcripción completa de este audio y ejercicios y explicaciones para aprender el vocabulario y expresiones que utilizamos en este episodio. Para acceder a ese contenido, puedes convertirte en suscriptor premium en Charlas Hispanas punto com. Hola, ¿cómo están?

Hace unos días estábamos hablando de la película Tango Feroz en el episodio que lleva su nombre, y les comentaba que durante la época inicial del rock nacional, las mujeres estaban casi en su totalidad destinadas a ser parejas de los músicos, acompañantes o groupies, como se llamaba a las admiradoras. Pero ellas no ocupaban el centro de la escena. Por supuesto, esto no era así en todos los casos, ya que hubo muchas y muy talentosas excepciones. Por eso se me ocurrió hablar en esta ocasión de las mujeres que han protagonistas de la escena musical, ya sea en el rock o en cualquier otro género. Debemos empezar por el inicio de la música argentina, el tango, En la época de oro, en la que surgieron cantantes como Carlos Gardel y compositores como Alfredo Lepera, también había mujeres en los escenarios y milongas.

Ya en el año mil ochocientos setenta y cinco tenemos a Eloísa der Ville, también conocida como Eloísa de Silva, que era una compositora reconocida por sus pares. Esta artista era pianista y, aunque había nacido en España, pasó setenta y cinco de sus un años de vida en Argentina. A comienzos del siglo veinte, otras cancionistas tomaron su lugar. Es el caso de Rosita Quiroga, cantante, compositora y autora, quien tenía en su repertorio más de doscientas obras de diferentes autores. Sin embargo, no fue tan conocida en su faceta de escritora.

También debemos mencionar a Azucena Maisani, compositora de tangos como Lejos de mi tierra. Esta autora revolucionó los escenarios al aparecer vestida con ropas masculinas. También debemos nombrar, si hablamos de compositoras de tango, a Eladia Velázquez, autora de clásicos como Honrar la Vida, El Corazón al Sur o Con las Alas del Alma. Pero sin dudas fueron dos las mujeres más célebres del ambiente tanguero en Argentina. La primera de ellas, Tita Merello, fue cantante, actriz, estrella de cine y de televisión, así como autora también de obras como Llamarada pasional, Decime, Dios, dónde estás, y al tango lo canto así.

La segunda de estas mujeres fue Nelly Omar, quien vivió ciento dos años y engalanó los escenarios de todo el mundo con su cantar privilegiado, por lo que fue llamada Lagardel con polleras. Saliendo ahora del tango, tenemos que hablar del género melódico, el de las baladas o las canciones románticas. En él ha tenido una presencia estelar durante décadas, Estela Rabal, dueña de una voz cautivadora que la llevó a También pertenece También pertenece al género melódico Valeria Lynch, dueña de una carrera plagada de éxitos, que fue además la intérprete de las canciones de las telenovelas más recordadas, como La extraña dama y Buenos Aires, Háblame de amor. Otra gran referente de este género es Patricia Sosa, aunque su caso es excepcional. Ella comenzó su carrera en la década de los ochenta, siendo vocalista del grupo de rock La Torre, el cual se transformó en uno de los máximos exponentes del rock pesado en castellano, con la potente voz de Patricia en primer lugar.

En el año mil novecientos ochenta y ocho, la banda se embarcó en una gira por la Unión Soviética, algo nunca visto hasta entonces para un grupo de rock argentino, y fueron uno de los primeros músicos extranjeros en tocar detrás de la cortina de hierro, realizando veintisiete conciertos en veintiocho días y reuniendo a cerca de trescientas mil personas. Al comienzo de la década de los noventa, la torre se disolvió y Patricia Sosa encaró su carrera como solista, volcándose más hacia la música melódica y romántica. Desde hace varios años tiene lugar en el Teatro Colón de la ciudad de Buenos Aires, nuestro más prestigioso escenario, un espectáculo llamado Las Elegidas, donde mujeres representantes de todos los géneros musicales cantan sus propios temas y los de sus colegas, generándose un show de gran intimidad y con resultados artísticos notables. Además de Patricia Sosa, forman parte de este concierto Julia Zhenko, Lucía Galán y Sandra Mianovic, figuras del género melódico, Soledad Soledad Pastorutti del folclore, y Karina Tejeda, la Princesita, referente de la cumbia y la música tropical. Con respecto a este último género musical, ya es más habitual ver mujeres cantantes, y en Argentina hay muchas de ellas que han hecho importantes carreras.

Algunas de ellas son Gladys, denominada la Bomba Tucumana, Leah Crucett, la recién nombrada Karina, y entre las más jóvenes, Ángela Leiva y Rocío Quiroz. También fue renombrada, y aún es recordada con cariño, Miriam Alejandra Bianchi, quien se hizo famosa con el nombre artístico de Gilda. Gilda era una joven delgada y tímida que trabajaba como maestra jardinera, estaba casada y tenía dos hijos chiquitos. Siempre había amado cantar y tenía una voz dulce y agradable. En el año mil novecientos noventa, se entera por un aviso en el diario de que estaban buscando voces femeninas para un nuevo grupo tropical, y decide presentarse.

Su matrimonio estaba terminando y tenía problemas de dinero en casa, así que decide probar suerte y además darse el gusto de cantar, ya que siempre había querido hacerlo. Allí conoce al guitarrista Totti Jiménez, quien enseguida ve en ella un carisma especial y la incluye en el grupo. Así comenzó su incursión en La Bailanta, como se llama en Argentina, a los lugares donde se baila música tropical, cumbia o cuarteto. Gilda fue bautizada así para su carrera musical y pronto comenzó a tener mucho éxito. Su figura agraciada, su rostro angelical y su voz diferente la hicieron ganar miles de seguidores muy rápidamente y, como todos los artistas de este género, empezó a tener muchas presentaciones en vivo en diferentes puntos del país.

Esto ocasionaba que las giras fueran extensas y agotadoras, ya que debían movilizarse en micros por rutas para llegar a los diferentes lugares donde se la esperaba desde todos los rincones del país. En uno de esos viajes tuvo un accidente al ser embestido su vehículo por un camión que circulaba por la misma ruta. En el lugar murieron Gilda, su madre y su hija, además de tres músicos de la banda. La cantante tenía treinta y cuatro años, y su carrera había durado solo seis. Ya durante sus presentaciones, algunas personas del público decían que experimentaban una sensación de paz y tranquilidad en su presencia, y algunos contaron que vivieron curaciones milagrosas que atribuían a su intercesión.

Nada de esto es comprobable, por supuesto, pero en el lugar donde sucedió el choque fatal, los admiradores instalaron un pequeño santuario, donde dejan fotos y velas, y en el cual se reúnen a cantar en las fechas especiales. Tanta ha sido la importancia de Gilda dentro de todo el ambiente de la música, que en los últimos años se ha realizado una película que retrata su vida titulada Gilda, No me arrepiento de este amor, igual que uno de sus temas más recordados, con la actuación de Natalia Oreiro en el papel de la cantante. Natalia ha contado muchas veces que es una gran admiradora y fanática de Gilda. Tiempo después de su muerte, fueron encontrados algunos manuscritos de la que sería la última de las canciones escritas por ella. Se publicó con el nombre de No es mi despedida, utilizando algunas grabaciones inéditas y, una vez más, batió récords de ventas.

Finalmente, en la actualidad hay muchas mujeres talentosas de todas las edades en el mundo de la música. Sin lugar a dudas, esto es un poco debido a todo lo que hicieron sus antecesoras. Patricia Sosa contaba que, en su época de la torre, las primeras veces que iban a los festivales de rock no querían dejarla subir al escenario porque pensaban que era la novia de uno de los músicos. Esto, en mayor o menor medida, debe haber pasado en todos los géneros, solo que algunas no han podido contarlo. En el rock, hoy están las mujeres de siempre, Fabiana Cantilo e Hilda Lizarazu, representantes de la mejor época del rock nacional, y Lula y Marilina Bertoldi, por nombrar algunas grandes cantantes de hoy.

También tenemos en Primer Plano a Lali, que pertenece al universo del pop, pero hace colaboraciones con músicos de rock y trap, entre otros. En el mismo género estántini, Martina Stoessel y Emilia Mernes, que concentran cantidad de seguidoras de todas las edades, atentas a cada nueva canción de su ídola, pero también a cada gesto o publicación en redes sociales. Porque sabemos que desde hace tiempo ya nadie va a comprar un disco ni un CD, sino que todo se escucha por las redes y hay plataformas donde podés escuchar la música que elijas sin interrupciones. Bueno, hasta aquí llegamos hoy hablando de Mujeres en la Música. Espero que te hayan dado curiosidad por escuchar alguna de ellas.

Hay muchas que han quedado en el tintero, así que en algún momento, tal vez, volvamos a hablar de ellas. Muchas gracias por acompañarme. Si quieren tener acceso a la transcripción completa de este episodio y a explicaciones y ejercicios sobre el vocabulario y las expresiones utilizadas el día de hoy pueden hacerlo volviéndose suscriptores premium en nuestra página web, Charlas Hispanas punto com. Yo soy Gabriela, de Argentina, y los espero en nuestro próximo episodio. Cuídense mucho y nos vemos la próxima.

Adiós.

Podcast: Charlas Hispanas
Episode: 1174. Mujeres de la música argentina