no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no no
no no no no no no no no no no no no no es un tema aburrido. Veréis, mucha gente la semana pasada me dijo que le gustaría conocer más cosas sobre España, pues entonces he decidido que voy a hablar un poquito más sobre España para que conozcáis conozcáis un poco cómo es España. Si tú estudias inglés o alemán o francés o ruso, quieres saber un poco cómo es esa sociedad, qué cómo es la historia, qué piensa la gente, qué hay detrás de, no sé, qué ha pasado antes de los años sesenta, los años setenta, todo eso, efectivamente, puede ser muy interesante, pero lo quiero hacer no como no como un documental, ya he dicho antes que quiero que esto sea algo personal, entonces no quiero dar datos así como un documental, como algo, como un programa de radio, ¿no? En mil novecientos setenta y cinco el presidente del gobierno, no, eso gobierno, no, eso no, eso sería, para mí sería muy aburrido. Creo que lo interesante es hacerlo más personal, ¿no?
Entonces, yo os voy a dar mi punto de vista, mi interpretación de los hechos, ¿vale? Y bueno, vosotros, si queréis, podéis podéis leer en Internet más información al respecto. Pero, bueno,
yo os voy a decir lo
que yo pienso. Internet más información al respecto, pero bueno, yo os voy a decir lo que yo pienso. Y hoy vamos a hablar del rey, vamos a hablar del rey, vamos a hablar de de la familia real española. En en España tenemos un un rey, ¿no? El rey Felipe sexto, ¿vale?
Que llegó al llegó al gobierno hace unos años, no hace no no hace no hace mucho tiempo. En mil, en en el año dos mil catorce, sí, en el año dos mil catorce, él, estaba su padre Juan Carlos primero, que
es muy popular en todo el mundo, porque
yo siempre que he
ido, no sé, aquí en Francia,
aquí, perdón, aquí en Inglaterra, en Italia, en Francia, todo el mundo conoce a Juan Carlos, todo el mundo conoce a Juan Carlos, es un tío, el rey el rey el rey el rey anterior, ¿no? Se llama el rey emérito, emérito, ¿vale? El rey el rey anterior abdicó, ¿no? Porque normalmente el rey, digamos, es rey hasta que muere pero, pues, en algunos casos, pues, en algunas situaciones por problemas, ¿vale? Puede ser problemas de salud o de otro tipo, el rey abdica, es decir, dimite, dimite del trabajo y el trono, la corona pasa a su hijo.
Y esto fue lo que pasó, que Juan Carlos, digamos que tuvo un montón de problemas en los últimos años, ahora sigue con problemas, sigue todavía con muchos problemas y entonces el tío pues abdicó en su hijo ¿no? En Felipe. Bueno, pues hasta ahora hasta ahora la gente en España, digamos que hasta los años noventa, hasta los años noventa, la gente estaba muy contenta con con Juan Carlos, con el rey anterior, ¿no? Con el rey emérito. Ahora ahora no tanto, ahora no tanto.
Entonces, ahora hay muchos movimientos de protesta, yo lo yo lo yo lo lo lo percibo, lo lo siento, ¿no? Lo siento. Hablando con la gente, antes antes era diferente, ¿qué ha cambiado? ¿Qué es lo que ha cambiado? Os voy a os voy a explicar un poco la situación en España para que entendáis un poco cómo funciona todo.
Mirad, Juan Carlos, Juan Carlos fue rey de España desde mil novecientos setenta y cinco hasta el año dos mil catorce, ¿vale? Que abdicó en su hijo. Juan Carlos lo nombró Franco, Francisco Franco, el el el dictador, el dictador Francisco Franco. Lo nombró como heredero de su régimen. En en ese periodo, cuando ya Franco estaba, el dictador Franco estaba muy viejo, es él estaba pensando en su heredero, en su sucesor, es decir, cuando él muriera, quién iba a ser su heredero, quién iba a continuar su obra, porque Franco, el general Franco, el el el dictador, no se consideraba a sí mismo como un, digamos, un dictador, una no no consideraba que su régimen era algo temporal, ¿vale?
Él antes en España había habido dictaduras, digamos, temporales, que en un período convulso, en un período de mucho de mucho peligro para para España, de en un momento donde había muchas revoluciones, no sé, pues llegaba un militar llegaba un militar y imponía imponía un un un una dictadura durante dos o tres años, ¿vale? Para resolver los problemas. Entonces, durante dos o tres años se ponía orden, pum, se cerraban los los periódicos, se prohibían los partidos políticos, se prohibían las elecciones y durante dos o tres años el tío, el dictador, ponía en orden, ponía en orden. Y después, cuando terminaba cuando terminaba ese periodo, devolvía el poder a los políticos, digamos, con la condición de que lo hicieran mejor que antes, más o menos. Eso es explicado así muy de forma muy general.
Pero Franco no era esto, Franco no era así. Franco no quería que su régimen terminara, Franco no quería que su obra, su España, la España que él había pensado, terminará con él, no, él quería que eso fuera una continuación, él quería que eso continuara. Lo que hizo Franco fue ponerse en contacto con la familia real española, con el rey, con el rey de España, que estaba en el exilio ¿vale? El rey de España había abandonado España en los años treinta porque, bueno, en España había llegado la República y entonces el rey se fue al exilio con toda su familia y estaban, bueno, pues creo que estuvieron un tiempo en Italia y después estuvieron en Portugal. Entonces Franco se puso en contacto con la familia real española en el exilio y propuso les propuso que la monarquía volviera a España con la condición de que el rey, el futuro rey, continuara su régimen, continuara su sistema político.
Entonces, lo que pasó fue que, bueno, el el príncipe Juan Carlos en aquellos años era un era un niño, era muy joven y, bueno, pues volvió a España para estudiar y para formarse con Franco. Entonces, digamos que Franco lo tenía un poco bajo control, digamos, y y de esa forma de esa forma se aseguraba, el dictador se aseguraba que el futuro rey continuaría su trabajo, continuaría su su sistema político. Entonces Juan Carlos, cuando era un niño, cuando era muy joven, pues vivía en España, estudiaba en España y se estaba formando para rey bajo bajo la protección de Franco, digamos, ¿no? Entonces, claro, como os podéis imaginar, los políticos españoles que en aquel momento estaban en el exilio, los socialistas, los comunistas, los liberales, los republicanos, que estaban fuera, estaban en México, estaban en Francia, estaban en Italia, en otros países, no veían con muy buenos ojos a Juan Carlos, no no no veían muy bien a Juan Carlos porque este este hombre había estado protegido por Franco, lo había nombrado Franco para que continuara su trabajo. Era el heredero de Franco, era el heredero del dictador, era el que se suponía que tenía que continuar el trabajo.
Entonces los comunistas, los socialistas, los demócratas, los los republicanos que estaban en el exilio no lo querían, no lo querían en absoluto. Pensaban que era otro dictador, era el el hijo del dictador, el hijo político del dictador. ¿Qué pasó? ¿Qué pasó? Pues que cuando Franco murió, Franco murió en mil novecientos setenta y cinco, automáticamente Juan Carlos fue nombrado rey de España, ¿vale?
El rey de España. En aquel momento nadie lo quería, nadie lo quería porque era era el continuador de Franco, pero pero desde el principio desde el principio Juan Carlos Juan Carlos primero, el el título oficial es Juan Carlos primero, dijo muy claramente que él quería ser el rey de todos los españoles, de todos los españoles. Desde su primer discurso, él dijo eso, yo quiero ser el rey de todos los españoles. ¿Qué pasó? Que empezó a hablar, empezó a tener empezó a tener contactos con los comunistas, con los socialistas, con la gente que estaba en el exilio, con los nacionalistas catalanes, con los nacionalistas vascos, empezó a hablar con todos, empezó puso
en contacto a la
gente de derechas, a la gente del régimen, a hablar y les dijo que España era de todos y que tenían teníamos que convivir todos, ¿vale? Entonces eso fue una una un un una algo fue algo que nadie se esperaba en aquellos años. Estamos hablando del año setenta y cinco, setenta y seis, setenta y siete, ¿vale? Entonces se dieron cuenta de que el rey tenía un plan, no era ellos pensaban que el rey era un títere, una marioneta, ¿entendéis? Un títere es un un juguete en manos en manos del dictador.
No, no era así, tenía su propia personalidad, tenía su tenía sus propias ideas de España y de cómo era cómo tendría que ser el futuro y se dieron cuenta de que el tío no quería ser un dictador, él quería ser el rey de todos los españoles, de los de izquierda, de los de derecha, de los socialistas, de los monárquicos, de los republicanos, de todos ¿vale? Y entonces se puso en contacto con todos y fue un período, fue un período que hoy en hoy se llama la transición, fue un período en el que gente que unos años antes había estado matándose en la guerra civil, ¿vale? Hubo no sé cuántos miles o millones de muertos durante la guerra civil, gente que se odiaba. Bueno, pues ahora, en el cuarenta años después, estaban sentados a la misma mesa discutiendo y dialogando para convivir todos juntos, ¿vale? Gente de franco con gente comunista.
Gracias en gran parte a Juan Carlos, ¿vale? A Juan Carlos primero. Eso es algo que cambió mucho la mentalidad de la gente, porque la gente no se fiaba de él, no se fiaba. Pensaban que iba a continuar la obra de Franco. Entonces, ese año, esos años, esos años que se llaman, como he dicho, la transición, fueron fueron unos años muy convulsos también, porque por un lado había mucha esperanza.
Volvieron los comunistas a España, volvieron los socialistas, volvió la gente que estaba en el exilio, la gente que estaba dentro de España no querían a los comunistas. La gente que es que estaba contenta con Franco no querían que volvieran los comunistas, no querían que volvieran los socialistas. Para para ellos el comunismo, el socialismo era era algo peligroso que podría llevar a la destrucción de España, ¿vale? Para los comunistas, los los franquistas eran fascistas, eran eran los que habían dado el golpe de estado, eran los responsables de muchos crímenes y total, que no se podían ver, se podían ver los unos a los otros, pero durante esos años digamos que se sentaron y fueron capaces de escribir una constitución, ¿vale? El rey el rey promulgó, hizo, escribió una serie de leyes, bueno, el parlamento ¿no?
El parlamento, pero por orden del rey, donde se legalizaban los partidos políticos, por ejemplo, se legalizó el el partido comunista, eso fue eso fue algo espectacular. Vosotros os imagináis, ahora es normal, pero en el año setenta y seis, setenta y siete, cuando después de cuarenta años de dictadura de franco, de dictadura anticomunista, donde el comunismo era el enemigo número uno de de España, de la humanidad, donde prácticamente los comunistas se describían como gente que se comía a los niños, ¿vale? Como alguien muy muy muy peligroso, el tío nombrado por Franco, heredero de Franco, llega y legaliza el partido comunista, no solo el partido comunista, sino muchos otros movimientos y partidos políticos de extrema izquierda, maoístas, estalinistas, grupos muy pequeñitos, pero sobre todo el partido comunista de España, que es el era la oposición más radical a Franco, ¿no? El el PC, el PC, partido comunista de España. Eso esos años fueron muy convulsos, había mucho terrorismo también, había terrorismo de ETA, había terrorismo de extrema izquierda, había terrorismo de extrema derecha también, porque la gente de Estoy diciendo que este periodo de la transición era un período, ¿cómo decir?
Era un período donde había mucha esperanza, porque se ponían a dialogar gente que se habían que gente que se había matado en la guerra civil, gente que de derechas que se había matado con gente de izquierdas, ¿no? Vale, pero no todos, no todos. Obviamente, había gente a la derecha, muy extrema derecha, que quería continuar la dictadura de Franco, quería y pensaba que el rey era un traidor, lo llamaban traidor al rey, porque el rey y efectivamente yo desde desde su punto de vista era un traidor porque digamos que había había sido educado por Franco para continuar su régimen y lo que había hecho es que desde dentro desde dentro lo estaba lo estaba desmantelando, ¿vale? Porque para para terminar la obra de Franco, para para terminar con la dictadura, desde fuera eso habría supuesto una guerra. La gente tenía miedo de que al morir Franco hubiera otra guerra, porque si el rey continuaba con el régimen de Franco, los comunistas o los socialistas, los demócratas en general, la única alternativa que tenían para derribar al dictador era la violencia, no quedaba otra alternativa, ¿vale?
Entonces, lo que él hizo fue destruir el régimen desde dentro, hizo que el régimen se autodestruyera, ¿vale? Entonces él usó las las las leyes del franquismo, las leyes de Franco, para destruir el franquismo desde dentro. Bueno, eso es una historia muy larga, ahora no tengo tiempo de explicarlo, pero el caso es que vosotros entendéis que la gente de extrema derecha, la gente que defendía Franco, no estaba muy contenta con el rey, hombre, pues pensaban que era un traidor, claro. Y la gente de extrema izquierda, la gente de extrema izquierda les parecía que simplemente lo que estaba haciendo era muy poco, le parecía que estaba haciendo muy poco, le parecía les parecía que el rey era el heredero de Franco y que lo que estaba haciendo era hacer una una serie de cambios muy pequeñitos, muy pequeñitos, para que todo continuara igual. Era, la gente de extrema izquierda pensaban que el rey, bueno, pues quería cambiar algunas cositas, algunas, digamos, la la decoración, quería quería cambiar la decoración, quería adaptar el régimen de Franco a los nuevos tiempos.
Habían pasado cuarenta años y y entonces sí, quería cuarenta años desde la guerra civil. Entonces Juan Carlos, sí, quería cambiar algunas cositas, pero lo fundamental era lo mismo, la la influencia de la iglesia católica, del del ejército, de la de las oligarquías económicas, todo esto, según la extrema izquierda, era prácticamente igual, no cambiaba nada. Entonces entonces Juan Carlos tuvo que tuvo que reunirse y convencer para que dialogaran los moderados, los moderados de izquierda y los moderados de derecha, pero eso ya era mucho, ya era mucho, Los moderados de izquierda era el partido comunista, no, Entonces, y los moderados de derecha, pues igual, no eran los, digamos, los fascistas, fascistas, pero eran gente muy muy radical de de de derechas. Hubo gente, enemigos, enemigos acérrimos, enemigos muy fuertes de toda la vida que es que que se se saludaban, que se sentaban en la misma habitación y que unos unos años antes decían que el otro era un asesino, un criminal y ahora estaban hablando y ahora estaban hablando por el bien de España, porque pensaron que, bueno, ellos tenían sus ideas pero que España al fin y al cabo era de todos y tenían que convivir todos.
Y bueno, entonces Juan Carlos hizo eso, convenció a los moderados de izquierda y a los o a la o a la digamos a la mayoría, excepto a los extremos, pero claro, los extremos siempre están ahí, ¿no? No convenció, claro, a los extremos a la extrema izquierda ni a la extrema derecha, pero digamos que a la mayoría del país la convenció, ¿no? La gente, la gente, los comunistas, los socialistas también tuvieron que también tuvieron que moderarse en el sentido de que los comunistas eran republicanos, por ejemplo, y y Juan Carlos les pidió aceptar la monarquía y aceptar la bandera de España. Y los comunistas tan republicanos tuvieron tuvieron un dieron dieron dieron un ejemplo muy bueno, dieron un ejemplo muy bueno, porque ellos, los comunistas, dijeron es verdad, aquí hay aquí hay que convivir todos, tenemos que convivir todos, ¿vale? Entonces nosotros somos republicanos, pero ahora hay que hay que hay que hay que llegar a acuerdos, hay que llegar a acuerdos, hay que crear un país que sea para todos.
Por el momento tenemos un rey, entonces los comunistas aceptaron a Juan Carlos. Hicieron ese gesto, o sea, para que España volviera a la democracia, para que hubiera democracia en España, tanto los de izquierdas como los de derechas tuvieron que hacer concesiones, tuvieron que hacer cosas que no les gustaba. Por ejemplo, los comunistas tuvieron que aceptar a Juan Carlos. Los comunistas en su en su ideología seguían siendo republicanos YYY han y siempre han dicho que quieren una república, pero digamos que en aquellos años aceptaron a Juan Carlos. Dijeron, por el bien de España aceptamos a Juan Carlos, por el bien de la convivencia de España.
Los la gente de derechas, la gente de derechas que odiaban a los comunistas aceptaron la legalización del partido comunista. En fin, estos estos son algunas algunos ejemplos de de lo que estaba pasando en España en en aquellos años. Había gente que estaba dispuesta a que en España hubiera democracia y había gente que estaba dispuesta a que no hubiera democracia, los terroristas, la gente de extrema izquierda y la gente de extrema derecha, ¿vale? Entonces, al final, ¿qué pasó? Bueno, pues que, bueno, poco a poco poco a poco Juan Carlos fue cayendo mejor, ¿no?
¿Entendés? A la gente le ya le caía un poco mejor Juan Carlos, porque estaba poniendo de acuerdo a gente de a todos los españoles prácticamente. Legalizó los partidos políticos, la libertad religiosa, había elecciones, había referéndum, en fin, se respiraba otro aire. Juan Carlos abrió las ventanas, ¿vale? Durante las ventanas estaban cerradas, como en una casa donde tienes las las ventanas cerradas, no entra aire.
Juan Carlos abrió las ventanas por primera vez, la gente empezó a respirar, ¿y qué pasó? Pues que en el año ochenta y uno, en el año ochenta y uno hubo un golpe de estado. Hubo un golpe de estado, no sé, muchos habréis visto estas imágenes de unos militares de la de de la guardia civil que entraron en el parlamento, en el en el congreso de los diputados, entraron pegando tiros, ¿no? Seguro seguro que habéis visto esas imágenes. Bueno, pues el, ¿qué pasó?
Ese ese ese era un grupo de militares que querían volver a la dictadura de Franco, al régimen de Franco y y, bueno, en aquellos años, hoy en día eso es impensable. Hoy en día los militares están integrados absolutamente en la democracia en España, pero en aquellos años no era así, porque esos militares son los que habían ayudado a Franco a ganar la guerra y son los que habían ayudado a Franco a estar en el poder, eran los militares franquistas. Estamos hablando del año ochenta, el año ochenta y uno, ¿vale? Franco llevaba muerto solo cinco años, muy poco tiempo. Esos militares, los jueces, todo el país estaba controlado por gente del franquismo, por gente de Franco.
Entonces, había mucha gente que no quería que continuara la democracia. Dieron ese golpe de estado el veintitrés de febrero de mil novecientos ochenta y uno. Todavía me acuerdo, yo era un niño, pero todavía me acuerdo porque fueron unos días muy muy peligrosos donde la democracia podía romperse y de hecho mucha gente se fue del país o prepararon las maletas. ¿Os imagináis si ese golpe de estado llega a triunfar? Hubieran matado a mucha gente, hubieran hubieran Aparte de que hubiéramos vuelto a la a la dictadura, es que habrían asesinado, habrían fusilado a mucha gente de los partidos políticos de izquierdas o demócratas en general.
¿Qué pasó? Los militares entraron en el congreso de los diputados y unas horas después hubo en Valencia y en otras ciudades hubo militares que se unieron al golpe, sacaron los tanques a la calle, no hubo hubo, sí, no solo en Madrid, hubo problemas también en algunas otras ciudades. Y esa noche los militares se encerraron con todos los diputados, con todos los diputados en el congreso, los secuestraron y en y se quedaron con ellos toda la noche, tenían el gobierno en sus manos, ¿vale? Y además fue espectacular porque se vio en la televisión y lo vio todo el mundo en directo, fue algo espeluznante, que algo que que puso la carne de gallina a todos los españoles, ¿vale? Y entonces, de verdad, de verdad la gente vio, de verdad, la gente vio la posibilidad de volver a la dictadura.
Podía ser algo terrible, ¿no? Y aquella noche, la connoche del veintitrés de febrero, el rey Juan Carlos hizo un discurso en la televisión, para todos los españoles, dirigido a los militares, en el que les recordó que él era el jefe de estado y que él era el único que podía dar las órdenes, y les daba las órdenes de volver volver a a los cuarteles y dejar libre al gobierno. Los militares, claro, los militares que tienen un sentido de, digamos, del deber, que obedecen a sus mandos, ¿vale? Pues no tenían no tenían más remedio que que obedecer al rey. El rey había dicho claramente lo que tenían que hacer, Porque si en aquel momento si en aquel momento el rey duda o dice algo que no está claro sobre la situación, sobre lo que él piensa, otros militares en otras ciudades podrían haber hecho lo mismo, podrían haber salido a la calle, podrían haber dado un golpe de estado, podrían que que es lo que querían.
Los militares que entraron en Madrid, en el en el en el congreso de los diputados, querían que otros militares de España salieran a la calle y se unieran al golpe. El rey salió y dijo no, no hay que unirse al golpe. Y entonces su orden fue muy clara y nadie, ningún otro ningún ningún otro militar se unió, YYYY así terminó todo. O sea, al por la mañana los militares que habían entrado en el congreso de los diputados se rindieron, se rindieron y fueron juzgados unos años más tarde y acabaron en la cárcel los responsables. Y desde ese día Juan Carlos se convirtió en, digamos, en un héroe, digamos, por algunos años fue visto como un salvador, digamos, como alguien que gracias a él gracias a él, no no había triunfado el golpe de estado, ¿vale?
Entonces, durante esos años se se reconoció se reconoció su labor, se reconoció su trabajo para haber terminado con la dictadura de Franco y también para haber impedido el golpe militar. Entonces, la gente empezó a darse cuenta de que de que el tío de que el tío valía la pena, ¿no? De que de de que era un buen tío, ¿no? De que tenía mucho prestigio, digamos, con los españoles. En en aquellos años, en aquellos años, si tú preguntabas a los españoles si eran republicanos o demócratas, muchos decían que eran juancarlistas, juancar lisa, es decir, de de Juan Carlos.
En el lo que querían decir es que, en teoría, en teoría eran republicanos. En teoría querían la República, pero Juan Carlos Juan Carlos Juan Carlos era Juan Carlos era un un un buen un buen rey y entonces lo aceptaban, lo aceptaban. Y esa esa fue la mentalidad de muchos españoles de izquierdas durante muchos años y de muchos españoles en general. Mucha gente se planteaba, monarquía, república, no no valía la pena plantearse eso dictadura o república, perdón, monarquía o república, no valía la pena, porque el rey era un buen rey. Había traído la democracia, había democracia de España, no había una, si venía una república, no no habría no habría una gran diferencia en en la libertad, en la vida de cada día.
Teníamos un rey abierto, un rey demócrata, teníamos democracia, teníamos libertad de expresión, libertad de reunión, libertad de de participar en las elecciones, partidos políticos, legalizados. ¿Qué podría cambiar en la práctica? ¿Qué podría cambiar realmente en la práctica? Muy poco, muy poco. Entonces, la gente se dio cuenta de que no valía la pena pelear, no valía la pena en no valía la pena discutir monarquía o república, que era mejor, la monarquía de la república, no valía la pena, no valía la pena.
Entonces, durante muchos años esa fue una discusión que no se planteaba en España. Lo que lo que pasó después lo que pasó después es que, bueno, si hubiera terminado ahí la historia, pues sería mucho mejor, pero lo que pasó fue que el rey Juan Carlos poco a poco, no sé no sé qué pasó, cometió cometió muchos errores, digamos, cometió muchos errores. Ahora no tengo tiempo de hablar de todas esas cosas, pero después en los años sucesivos, en los años que que que vinieron después, cometió muchos errores él y también su familia. Los años ochenta, los años noventa, cuando yo estaba en España, al rey lo querían mucho los españoles, lo que lo que lo queríamos mucho los españoles. Pero hubo una serie de errores, no sé, su familia cometió errores también y poco a poco las nuevas generaciones también.
Lo que ha pasado también es que las generaciones jóvenes, los chicos que tienen ahora veinte, treinta años y, claro, ellos no tienen la experiencia de la dictadura de Franco, ellos no tienen la experiencia de de la transición, ellos no tienen la experiencia de esos años, ellos no han vivido eso. La gente de mi edad, sí, la gente de mi edad lo hemos vivido y entonces sabemos lo lo difícil que fue que viniera la democracia, los riesgos que hubo, los peligros que hubo, el terrorismo, los golpes militares, todo esto y entonces nosotros hemos vivido ese periodo y nosotros sabemos quién era Juan Carlos. Yo, por lo menos, yo por lo menos lo tengo lo tengo a a pesar de todos los errores que ha cometido después, lo tengo en en estima, me cae bien, digamos, me cae bien, porque recuerdo todos esos años. Pero después, bueno, el después ha cometido errores. Ahora está metido en en un lío Juan Carlos, está metido en un lío de, bueno, creo que han han descubierto que que tiene dinero en en Suiza, en algunos bancos de Suiza.
La gente ahora, la gente joven, ya lo que hizo antes no lo recuerda y no le importa. Que ven ahora es un es un es un hombre ya viejo que posiblemente ha cometido algunos delitos de corrupción, no se sabe todavía, no se sabe, pero se sospecha que no todo lo que hizo estuvo bien. En fin, entonces, las nuevas generaciones las nuevas generaciones de España no Estoy estoy hablando en general, obviamente, entendéis, ¿no? Estoy hablando en general, pero creo, tengo la impresión de que a las nuevas generaciones, a la gente joven, el el el rey emérito, el rey Juan Carlos primero, pues no le no le no les cae demasiado bien, digámoslo así, no les cae demasiado bien. Y yo lo entiendo, yo lo entiendo porque Juan Carlos ha cometido errores, ha cometido muchos errores, algunos de ellos errores bastante graves, porque ahora no sé si si estáis siguiendo las noticias de España, sabréis supongo que sabréis que puede estar implicado, se sospecha que que estuvo implicado en algunos temas de corrupción, que se quedó con dinero de algunas cosas, en fin, que tiene dinero en Suiza, quizás en en bancos de Suiza, no sé, no no hay nada demostrado por el momento, creo, pero hay hay sospechas de que cometió algunos delitos de corrupción, ¿vale?
Entonces, en fin, es una pena, Es una pena porque era un hombre que tenía tanto prestigio, era un hombre que en los años ochenta, los años noventa tenía muchísimo prestigio, se había agradado el cariño de de tanta gente, incluso de los comunistas, de de gente que había odiado siempre al rey, a la monarquía, lo defendían, se reunían con él y decían yo no soy no soy no soy monárquico, soy juancarlista, ¿no? Eso demostraba el cariño que le tenían, y es una pena es una pena que este hombre ahora se vea, los últimos años de su vida se vea metido en todos estos problemas por tantos por tantos errores. En fin, otro día otro día hablamos otro día hablamos más de este tema, otro día seguimos hablando de estos temas. Puede ser interesante hablar de vez en cuando aquí en el podcast de de las cosas que pasan en España, de la historia de España, de de, en fin, sí, de temas culturales de de este tipo, ¿no? Siempre con un toque personal, ¿vale?
Yo lo que os doy aquí es mi visión personal, no soy un profesor de historia ni ni soy un profesor de sociología ni de política ni nada, Esto es mi mi visión personal, la podéis la podéis tomar como queráis, pero es, sobre todo, sobre todo es una opinión mía personal, mi visión, mi mi mi punto de vista, ¿de acuerdo? Que, bueno, yo creo que yo creo que ese es el objetivo del podcast, ¿no? Yo ya os he dicho antes que no quiero que este podcast sea algo como un documental o algo así de las noticias, algo así muy frío, no, impersonal, no, no, no, yo quiero que sea personal, yo quiero que sea, bueno, como yo soy, ¿no? Esto es lo si si vosotros estuvierais conmigo aquí tomando un café, pues esto es lo que yo os diría, ¿vale? Chicos, lo dejamos aquí por hoy, que me enrollo como una persiana, venga.
Nos vemos, nos vemos, no nos vemos, no, nos escuchamos la próxima semana, aquí, El Español con Juan. Hasta luego, Español con Juan Carlos. Hoy ha sido Español con Juan Carlos, venga, hasta luego.