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Y ahora, empecemos. Treinta y seis, visitas domiciliarias. Ignacio duerme una siesta exprés para recuperar las energías de esa noche agitada y se prepara para comenzar la investigación. Coge el uniforme de policía que Rubén le dio ayer y, al verlo de cerca, nota que es de una talla bastante más grande que la suya. Parece que los comisarios de pueblo chico tienen cuerpo de leñador, piensa mientras se prueba la ropa.

Su reflejo le hace acordarse de su infancia cuando se probaba los zapatos gigantes de su padre. Ignacio sube a su coche y comienza a visitar todas las casas marcadas de Velmez. Todos lo invitan a entrar, pero se sorprende al ver que nadie quiere hablar con él. No tienen problema en charlar sobre el clima o en ofrecerle café con bizcochos, pero en el momento en que Ignacio les pregunta sobre su trabajo en la mina, los vecinos se cierran por completo y dan la conversación por terminada. Ni siquiera la ternura de rayos x logra sacarles una palabra.

Sus voces se llenan de miedo y piden continuar otro día. Ignacio está pasmado, ¿por qué no quieren hablar? Tras múltiples fracasos, Ignacio llega hasta la puerta de la última casa marcada, la de la familia Arias. Glosery, siesta, nap, prepararse, to get ready, talla, size, leñador, lamberjack. Probarse, to tri on, ropa, close, zapatos, sous, bizcochos, biscuits.

Ternura, cutis, fracasos, fallyers. Treinta y seis, visitas domiciliarias. Ignacio duerme una siesta exprés para recuperar las energías de esa noche agitada y se prepara para comenzar la investigación. Coge el uniforme de policía que Rubén le dio ayer y, al verlo de cerca, nota que es de una talla bastante más grande que la suya. Parece que los comisarios de pueblo chico tienen cuerpo de leñador, piensa mientras se prueba la ropa.

Su reflejo le hace acordarse de su infancia cuando se probaba los zapatos gigantes de su padre. Ignacio sube a su coche y comienza a visitar todas las casas marcadas de Velmez. Todos lo invitan a entrar, pero se sorprende al ver que nadie quiere hablar con él. No tienen problema en charlar sobre el clima o en ofrecerle café con bizcochos, pero en el momento en que Ignacio les pregunta sobre su trabajo en la mina, los vecinos se cierran por completo y dan la conversación por terminada. Ni siquiera la ternura de rayos x logra sacarles una palabra.

Sus voces se llenan de miedo y piden continuar otro día. Ignacio está pasmado, ¿por qué no quieren hablar? Tras múltiples fracasos, Ignacio llega hasta la puerta de la última casa marcada, la de la familia Arias.

Podcast: StoryLearning Spanish
Episode: Season 8 - Episode 36. Visitas domiciliarias