00:00
00:00
Hola a todos, I'm Rocio.

And I'm Jesús.

Welcome to LanguaTalk Spanish, the podcast that helps you improve your Spanish by listening to casual conversations.

Spaniards are known for speaking fast. To help you understand, we'll speak at a slower pace than we usually do. If you listen on our website, Languatalk.com slash podcast, you can read an interactive transcript as we speak as well as see translations for some of the words and phrases used in the episode.

Today we are going to be talking about health.

Now let's switch to Spanish.

¿Tú, Jesús, consideras que llevas una vida sana, saludable? ¿Sana? ¿Saludable?

Pues... Ahora te diría que sí, que llevo una vida más o menos sana, saludable, pero Tengo que admitir, Rocío, que he tenido mis años o mi época de no preocuparme en exceso por la salud.

Pero ¿en qué sentido? ¿Qué era diferente antes que no tenías una vida tan sana?

Pues básicamente que ahora ya soy viejo.

Viejo, joven, recuerda.

Viejo, joven, viejo, joven. No, en serio. Pues que, hombre, nos hacemos mayores y ya no nos recuperamos tan fácilmente como cuando éramos jóvenes. Y entonces es cierto que cuando era más joven quizás no me preocupaba mucho por lo que comía, cuánto lo comía, el poco deporte que hacía... ¿Por qué?

Pues porque al final era más fácil recuperar todos esos excesos que hacíamos cuando éramos más jóvenes. Yo no si a ti te pasa, pero ahora cada vez que tienes o que tengo un kilo más, Necesito tres meses de dieta y deporte para eliminarlo.

¡Maldito metabolismo! Y yo tengo el añadido de que tengo una enfermedad crónica, que es el hipotiroidismo, que es, bueno, que no tengo tantas hormonas, no tengo tanta cantidad de hormonas como una persona normal y mi metabolismo es excesivamente lento. Y entre otros síntomas que tiene esta enfermedad, Uno es que es muy difícil perder peso y muchas veces es muy frustrante.

Pues me imagino que que es frustrante. lo es. Sin tener problemas de tiroides, pues no me quiero ni imaginar.

¿Y tienes alguna enfermedad?

¿Crónica? Sí. No, yo tengo la enfermedad de que atraigo todo lo que ocurre a mi alrededor. Quiero decir, por ejemplo, vivimos en Tailandia. ¿Quién de todas las personas que conocíamos en Tailandia, ¿tu, Bodengue?

Nadie, solo una persona. Yo.

El imán de los desastres.

Sí, pues igual con, con, no sé, de repente, ya acuérdate, una neumonía que ni los médicos sabían por qué era. O una piedra en el riñón lo más doloroso que he tenido en mi vida. Bueno, pero, esto es un poco broma, en realidad tengo la suerte de no haber tenido nunca enfermedades graves.

De esas enfermedades que has dicho, por las que has tenido que ir al hospital, probablemente la más curiosa sea la del dengue.

Sí.

¿Cómo supiste que era dengue? ¿Qué síntomas? ¿Qué pasó?

Bueno, aquí hay mucho que contar, Rocío. Mira, yo recuerdo, y recuerdas también, que donde nosotros vivíamos no había dengue. Entonces, un fin de semana, decidimos ir más al sur de Tailandia a pasar el fin de semana Y recuerdo... Bueno, nos picaban mosquitos a diario. Pero recuerdo perfectamente cuál fue el mosquito que me transmitió el dengue.

Jesús, eso es imposible saber cuál fue el mosquito que te picó y te contagió esta enfermedad.

Rocío, no has tenido dengue, así que no puedes hablar. Yo qué mosquito fue y en qué momento de la noche ocurrió. Bueno, el caso es que pasamos el fin de semana, volvemos a nuestro pueblo y a los cuatro días empiezo a notar fiebre, cansancio, como una gripe.

Tenías la temperatura altísima. Sí, bueno. Como 40 grados.

Allí hace siempre mucho calor. Un poco de fiebre ya era mucho. Pues, no sé, yo seguí yendo al trabajo, ya sabes cómo soy, pues tengo fiebre, no pasa nada, puedo ir a trabajar, a clase, al colegio. Esa fiebre continuaba día tras día, sin disminuir, y yo sabía que no era gripe. Y dije, dengue.

Yo sabía que era dengue, Rocío. Y efectivamente, el médico dijo que era dengue.

¿Y cuál fue el tratamiento que te dijo el médico que debías seguir?

Lo digo tal y como me lo dijo él. Él me dijo, ¿Drink water?

¿Bebe agua?

Claro, y yo pregunté, ¿Cómo? Y él repitió, ¿Drink water? Y entonces deduje que me decía drink water y yo estaba muy preocupado porque que la única solución que te da el médico es que bebas agua, pues era como raro, y yo estaba muy asustado.

¿Pero todo terminó bien?

Sí, excepto por una cosa. No si recuerdas, pero en nuestro barrio residencial de casitas tan bonitas de serie de televisión, pusieron un cártel gigante de, no sé, seis metros de largo, con un mosquito gigante y un peligro de dengue.

Yo recuerdo las miradas de nuestros vecinos cada vez que nos veían pasar, porque nos miraban como acusando.

Sí.

Son ellos los que han traído el dengue a este pueblo.

Pero bueno, y otra vez, afortunadamente, el dengue, si eres una persona más o menos saludable y no tienes otras enfermedades, al final es como una gripe fuerte, pero no es tan tan tan serio.

El problema muchas veces no es en la enfermedad o los síntomas, es el no saber qué tengo, qué me pasa, por qué, y nadie tiene respuestas.

Exacto.

Sí. Hay muchas enfermedades raras y como son raras, muchos médicos no están preparados para saber cuál es el tratamiento o solución.

Bueno, yo te voy a hablar de dos o tres enfermedades raras que estoy seguro que no has oído nunca.

Si me dices los síntomas, tal vez yo tengo esta enfermedad.

No, te voy a decir primero el nombre. Vale. Por ejemplo, hay una que es El síndrome de olor a pescado.

¿Esto es que una persona siempre tiene... Que siempre huele, todo huele para esta persona a pescado o que esta persona huele mal?

Me temo que es lo segundo, Rocío. ¡Ay, qué horror! ¿Te explico?

Por favor.

Pues es una enfermedad originada por un fallo, por un error en el hígado. Entonces, produce una encina y esta encina hace que tu sudor... Encima. Perdón, sí, una...

Perdón, una encima

con M. Y esta encima hace que tu sudor y tu orina huela a pescado o algo similar al pescado.

Y esto no tiene... Y el aliento. ¿Nuestra perra puede tener esta enfermedad?

No, ella yo creo que ha comido en su vida demasiado pescado podrido.

Madre mía, qué horror. Porque imagino que al ser una enfermedad rara no debe tener un tratamiento o una solución y tener que aceptar que el resto de tu vida vas a apestar a pescado.

Hombre, yo creo que en esta situación en la que además el olor se transmite por el sudor, el aliento y la orina, creo que no haría deporte nunca en mi vida.

Ni iría a baños públicos.

Y usaría la mascarilla para siempre. ¡Pobre gente, Rocío!

Sí. Bueno, este primero más o menos he adivinado en qué consistía. Quiero más.

Pues... ¿Qué te pasaría si de repente te das cuenta de que no puedes sentir dolor?

Ah, yo vi un episodio de la serie de televisión House, yo creo, de Anatomía de Grey, que un paciente tenía esto y el problema de estos pacientes es que como no sienten dolor, no son conscientes de que tienen o un corte, o una quemadura, o una enfermedad y mueren muy jóvenes.

Y son más dados a autolesionarse.

Claro, porque cuando estás cocinando y te quemas, la reacción de tu cuerpo es quitar la mano. Pero si no lo sientes...

Claro. Y además no sólo no sienten dolor, sino que tampoco sienten el calor o el frío.

Y tampoco sienten placer. Imagino.

Eso ya no lo sé, Pero claro, imagínate que vas a la nieve y no sientes frío y pasas la noche, yo que sé, porque te pierdes en el bosque y no te refugias.

Mueres de congelación.

Pero no te das cuenta. ¡Wow! Esto le ocurre a una de cada 100 millones de personas.

Madre mía.

Supongo que nadie intenta buscar una cura para esta enfermedad.

Pues deberían.

¿Para una persona de cada 100 millones?

Sí.

Vale, pues entonces se busca. A ver, hay una muy curiosa. Esta no la conocía, la he descubierto hace poco, y el nombre es Argiria. Argiria. ¿Te suena esa palabra, la A, la G, algo?

Me suena al país Argelia, pero...

¿Y en cuanto a física, a símbolos químicos...

No tengo ni idea, no des más rodeos, ve directo al grano.

Pues viene de... Bueno, del símbolo, como el símbolo químico AG que viene de la plata.

Ah, sí.

Pues viene por ahí. Y es un desorden del color de la piel que hace que la piel humana sea de un tono gris azulado. Azul, como un avatar. Como un pitufo. Como un Smurf.

Y es como por un exceso de plata en la sangre?

De exposición prolongada a la plata. Entonces, sobre todo esto se ha dado en personas que trabajan con este metal.

Así que si yo estoy prolongadamente expuesta al oro, me convierto en una mujer de oro, con la piel dorada.

Sí, claro. Y te puedo vender al mejor postor.

¡Qué bonito!

Pues... Pues eso te cuento.

Pues muy interesante. Yo espero no tener ninguna de estas enfermedades y seguir sana, con salud de hierro, como un toro, como una rosa.

¡Hombre! Y además, puestos a elegir, prefiero ser azul que oler a pescado. Gracias por escuchar este episodio. Si vas a languatalk.com podcast, puedes reescuchar el episodio mientras lees un transcripto interactivo que olera pescado. Y si estás interesado en aprender a hablar español con un tutor nativo, ve a Languatalk.com para conocer a un tutor para una sesión de prueba de 30 minutos.

Si te gustó este episodio, por favor considera suscribirte, compartir el podcast con un amigo o dejar un rating en tu aplicación de podcast. Esto nos ayudará a crecer, lo que nos permitirá continuar creando episodios.

¡Hasta luego! ¡Nos vemos!

Podcast: LanguaTalk Spanish
Episode: Health